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¿Por qué la radioterapia hipofraccionada podría ser más efectiva en el tratamiento del cáncer de próstata?

  • Foto del escritor: Doctor Juan Carlos Galvis
    Doctor Juan Carlos Galvis
  • 5 may
  • 2 Min. de lectura


Nuevos hallazgos biomoleculares sugieren que tratar el cáncer de próstata con menos sesiones de radioterapia pero con mayor intensidad podría ser más beneficioso para los pacientes.


Radioterapia y cáncer de próstata: ¿cómo actúa?


La radioterapia es uno de los tratamientos más utilizados para combatir el cáncer de próstata, especialmente en etapas localizadas. Tradicionalmente, este tratamiento se administra en múltiples sesiones con dosis fraccionadas —es decir, varias aplicaciones de radiación de menor intensidad. Sin embargo, estudios recientes están replanteando esta estrategia.



Pocas dosis, mayor impacto: el poder del hipofraccionamiento


Según análisis biomoleculares recientes, el cáncer de próstata responde mejor a lo que podría compararse con "cinco puños fuertes" en lugar de "muchos puños suaves". Es decir, una menor cantidad de sesiones de radioterapia, pero con mayor intensidad (hipofraccionamiento), parece generar mejores resultados clínicos.

Este enfoque no solo es más conveniente para los pacientes —al reducir el número de visitas al centro oncológico—, sino que disminuye la capacidad del tumor de desarrollar resistencia.



¿Qué revelan los estudios moleculares?




  • Aumento de mutaciones con múltiples fracciones: El tratamiento con muchas sesiones ha demostrado generar un número mayor de mutaciones a nivel del ADN, lo que lleva a un comportamiento más agresivo del tumor.

  • Activación de mecanismos de defensa tumoral: Estas mutaciones favorecen la activación de vías celulares que permiten a las células cancerosas sobrevivir, evitar la apoptosis (muerte celular) y reparar el daño causado por la radiación.

  • Desregulación de genes “drivers”: A nivel del ARN y las proteínas, se ha identificado que el fraccionamiento prolongado estimula la actividad de genes clave en el desarrollo y progresión del cáncer, conocidos como genes drivers.


Beneficios del hipofraccionamiento


  1. Menor acumulación de mutaciones tumorales

  2. Limitación de la capacidad adaptativa del cáncer

  3. Reducción del fenotipo agresivo del tumor

  4. Tratamiento más corto y cómodo para el paciente

  5. Evidencia molecular que respalda su efectividad


Desde mi experiencia como especialista en cáncer de próstata, considero que estos hallazgos respaldan firmemente el uso de la radioterapia hipofraccionada. Esta estrategia permite limitar con mayor eficacia la supervivencia de las células tumorales y frenar la progresión del cáncer, ofreciendo mejores resultados para mis pacientes.





 
 
 

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